Ya lo escribió alguien antes:
Hay diez centímetros de silencio entre tus manos y mis manos;
una frontera de palabras no dichas entre tus labios y mis labios;
algo que brilla así de triste entre tus ojos y los míos...
No se me ocurre a mí, hay algo que brilla así de triste.
La soledad más grande, la que ocurre cuando simplemente
creíste estar acompañado...
Mientras, la lluvia escribe lágrimas en los cristales de los coches;
mientras, aquí afuera, el frío...
mientras, las calles, los perros, las casas, lo que brilla así de triste...
así de triste...
y aquel mortal que dejó de serlo porque nos dejó sus letras dice al final del mismo:
ResponderEliminar...a veces no me siento tan solo
si imagino mejor dicho si sé
que más allá de mi soledad y de la tuya
otra vez estás vos.
Que lo amo y lo pienso mientras usted piensa en esa soledad...
Mar.
Albantro y Mar:
ResponderEliminar¡Ah!, es hermoso leerlos a los dos.
Don... ¿quién le dijo que ésto es cursi?... a mí nomás me hace soñar.
¡Beso a ambos!
Tangómana
... así de triste... como ponen sus series me encanta esta tercera de las soledades esta increíble el contraste, master una vez má me kito las trenzas. Un abrazo
ResponderEliminarlinkeado en el mono a pie ..saludos desde Guadalajara ( click )
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